LA ARQUITECTURA ROMANA: EL URBANISMO ROMANO Y LA CONCEPCIÓN DEL ESPACIO ARQUITECTÓNICO.
A diferencia de la concepción espacial griega (que valora el espacio externo, el carácter escultórico del edificio), el espacio romano es algo interno, un espacio en el que el hombre se siente inmerso. Se trata por tanto, de una arquitectura del espacio interior. Los edificios romanos se cerrarán. En la arquitectura romana se fundirán lo bello y lo suntuoso, con lo útil y práctico. Además de arquitectos, serán ingenieros y urbanistas. Y esto se aprecia, sobre todo, en su concepción urbanística.
En la civilización romana la ciudad ocupa un lugar privilegiado. La ciudad es el centro económico y político por excelencia, y esto explica que los romanos fundaran ciudades en lugares en que el concepto urbanístico estaba poco desarrollado o no era conocido, como en el área occidental del Imperio. La función del urbanismo romano es triple:
· Solucionar los problemas que la función o el crecimiento urbano plantea (abastecimiento de aguas, alcantarillado, transporte urbano, plazas públicas, defensa, etc.).
· Efecto psicológico: impresionar al resto del mundo, del que los romanos se sienten dueños.
· Favorecer la colonización humana y material de los territorios conquistados para el Imperio y consolidar la dominación política del mismo.
La solución urbanística aportada por los romanos es racional, rápida y clara, como prefieren los pueblos colonizadores; adoptan el “Plano en cuadrícula”, con dos ejes que se cortan perpendicularmente (cardo y decumano) y en su intersección aparece el “Foro”, lugar en el que se ubican los edificios públicos y se congregan los mercaderes. El origen de este plano está en los campamentos militares que las legiones romanas levantaban, aunque ya los griegos habían racionalizado el trazado de la ciudad con su concepción hipodámica, tan similar a la adoptada por los romanos. El concepto romano de ciudad sigue manteniendo su pujanza en la actualidad, siendo cierto que la mayoría de las ciudades actuales de occidente nacieron entonces bajo su inspiración.
CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LA ARQUITECTURA ROMANA.
El temperamento y la sensibilidad artística de los romanos difería de la de los griegos: frente al esteticismo heleno, el pragmatismo romano. De aquí deriva el carácter utilitario, funcional, de su arquitectura. Por otra parte, el poderío político y militar del estado romano, su expansionismo militar y extraordinaria dimensión territorial, hizo necesario el desarrollo de una ingeniería civil al servicio de las necesidades de la sociedad y del Estado. Los romanos serán, pues, antes ingenieros que arquitectos.
Podemos destacar los siguientes rasgos característicos:
· Utilización sistemática del ARCO DE MEDIO PUNTO y la BÓVEDA para cubrir recintos de gran amplitud, sobre todo a partir del s. II. Esta solución, que no excluye el uso de los SISTEMAS ADINTELADOS, es herencia de la civilización etrusca y del contacto con las grandes civilizaciones orientales (Mesopotamia). Estas soluciones se acomodan bien a las necesidades romanas porque permiten crear espacios grandiosos y prácticos al mismo tiempo.
· En muchos edificios los arquitectos romanos superponen el dintel al arco (de ½ punto o semicircular), lo que genera efectos de gran dinamismo.
· El tipo de Bóvedas utilizado es variado: de aristas, de cañón, semiesféricas, gallonada, de cuarto de esfera, anular, de nervios, etc. Especial mención merece la CÚPULA (utilizada en las provincias orientales), en la que los arquitectos romanos demostraron una extraordinaria pericia. Para levantar las bóvedas había que solucionar dos problemas; su erección y los apoyos de la misma. El primero lo solucionaron montando una cimbra de madera con la forma que se deseaba dar a la bóveda y, una vez construida ésta, se desmontaba la cimbra. El problema del soporte o apoyos de la techumbre abovedada motivó la sustitución de los elementos de apoyo. Emplearon, sobre todo, las pilastras y los muros de gran espesor, reforzados exteriormente por contrafuertes que contrarrestaban los empujes de la cubierta. Las columnas reducen su función a mera ornamentación. Las cubiertas abovedadas se generalizarán en la época imperial.
· ASIMILACIÓN DE LAS FORMAS GRIEGAS: utilización de los órdenes arquitectónicos, aunque de forma más ornamental que funcional. Superposición de diferentes órdenes en una misma fachada, buscando más el efecto de riqueza ornamental. El empleo no puramente constructivo de los órdenes griegos, sino adosados al muro, transforma el entablamento en un elemento decorativo más, que los arquitectos romanos tratarán con total libertad. A pesar de esto, crearán dos ÓRDENES NUEVOS: EL ORDEN TOSCANO, similar al Dórico griego, pero con el fuste liso; y el llamado ORDEN COMPUESTO, que utiliza elementos del jónico y del corintio en su capitel. De los órdenes griegos el preferido por los romanos es el corintio, por su mayor riqueza ornamental. Todo esto es conforme con la tendencia a utilizar cada vez más los elementos constructivos como elementos decorativos, en un claro proceso de barroquización.
· Los MATERIALES empleados son: la SILLERÍA, con innumerables aparejos para el muro, el LADRILLO COCIDO VISTO y EL MORTERO U HORMIGÓN, un material pobre y barato creado a partir de un mezcla de cantos rodados o piedras pequeñas, y arena, unidas por cal viva disuelta en agua; una vez seco, este material era prácticamente indestructible, duro como la misma piedra. Los romanos llamaban a este material OPUS CEMENTITIUM. Este material les permitió levantar construcciones colosales de gran robustez, con gruesos muros que exigían un rico revestimiento de mármol, mosaico, estuco pintado, etc.
Muchísimas gracias por la claridad! Esta muy bien!
ResponderEliminarMuy completo y, sobre todo, escrito con suma claridad.
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